viernes, 22 de octubre de 2010

La Catedral de Quito

El grupo escultórico llamado "La sabana santa", una de las obras más armoniosas e intensas de Caspicara; la Inmaculada de Legarda; el grupo de la negación de San Pedro, atribuido al Padre Carlos, el legendario artista que talló en 1668 el San Lucas de Cantuña; el lienzo de la muerte de la Virgen, de Miguel de Santiago, puesto en el muro del trascoro y la serie de retratos de obispos son algunas de las obras mas dignas de verse en la conocida "Catedral de Quito".

A pesar de ser modesta en apariencia, esta iglesia es en realidad un baul lleno de tesoros artisticos que sorprenden a los ojos mas críticos, sean estos nacionales o extranjeros y aunque en lo personal solo he visto estas obras por fotos o publicadas en internet me siento orgulloso de la importancia que se le da a nivel mundial por su contenido histórico y artístico.


Ahora me parece correcto hablar de las manos que hicieron estas obras, aunque a merced de los españoles tanto la mencionada catedral como muchas de sus obras fueron realizadas por manos ecuatorianas, un talento que muy pocos han visto como el de caspicara o cantuña, del cual se dice construyó la capilla sixtina del arte quiteño, me parece sumamente curioso y halagador que la comparen con tal majestuosa obra, muchos mitos y leyendas giran alrededor de este personaje, el mas conocido es el "pacto con el diablo" para construir la capilla que hasta hoy lleva su nombre, cabe recalcar que la capilla de cantuña esta ubicada en la iglesia "San Francisco de Quito", sin embargo me parecio relevante mencionar dicha obra.
A continuación les daré unos detalles históricos de fuentes de libros y también sacados de internet sobre la "Catedral de Quito"
Hasta mediados del siglo XVI la catedral deQuito era de tapias y cubierta de paja. Entonces comenzó la iglesia actual el obispo García Díaz Arias, y la prosiguió el siguiente obispo, gran constructor, Pedro Rodríguez de Aguayo. Una quebrada honda que corría hacia la parte de atrás impidió que se la edificase con frente a la plaza mayor.

Entonces, se tendió a todo lo largo de su flanco norte un patio central de piedra. Con la colaboración entusiasta de los vecinos y trayendo la piedra del Pichincha, la obra se terminó entre 1562 y 1565. Más tarde se labraron retablos y se talló el púlpito. Entonces el templo se consagró en 1572. Sin embargo, todo lo que hoy podemos apreciar fue completándose a lo largo de los siglos XVII y XVIII. A fines de este siglo se edificó el domo que corta por la mitad el atrio y se abre en escalera circular al parque, que, con el nombre del presidente de la audiencia que lo hizo, se conoce como el "templo de Carondelet". En estilo neoclásico se trabajó el domo, así como el coro catedralicio, talla de Caspicara. En el altar mayor se puso el gran lienzo del tránsito de la Virgen, de Manuel Samaniego. El propio Samaniego y Bernardo Rodríguez pintaron episodios de la vida de Jesús en las enjutas de los arcos. Y, entre 1802 y 1803, Bernardo Rodríguez trabajó los cuatro grandes lienzos de las naves laterales: la pesca milagrosa; curación de un pobre por San Pedro; conversión de San Pablo y San Pablo picado por una víbora.
 ¿Será esta una obra digna de admirar por todos? o tal vez, ¿seremos todos dignos de admirar tal despliegue de expresión artística?
Cristopher Parreño A.

1 comentario:

  1. Es verdad es muy humilde su fachada, pero sinceramente es un conjunto de la armonia del arte de la epoca, me agrada mucho tu articulo!

    ResponderEliminar